
Según la publicación, inicialmente, el desarrollo y despliegue de estos misiles tácticos se planeaba completar en el año 2019. Sin embargo, la demora en las negociaciones con la parte estadounidense sobre el acceso de Corea del Sur al sistema de posicionamiento global GPS y la reducción del presupuesto correspondiente para el próximo año hizo sus correcciones a estos planes, señala el periódico.
La República de Corea comenzó a desarrollar misiles anti-bunker tierra-tierra en 2013. En el caso de un conflicto armado con Corea del Norte, se supone que destruyen las posiciones fortificadas de la artillería norcoreana concentrada en el área fronteriza intercoreana y que representan una amenaza directa para Seúl. El alcance de los misiles será de unos 120 km, transmite TASS.